Dientes sanos y fuertes
- Sara Marchena
- 15 feb 2016
- 2 Min. de lectura
Es vital no descuidar uno de los componentes más importante de un cuerpo sano: tus dientes!
Aunque te cepilles después de cada comida y utilices el hilo dental de vez en cuando, no es suficiente para mantener tus dientes sanos. Tu cuerpo requiere varias vitaminas que se utilizan exclusivamente para construir y mantener unos dientes sanos y fuertes.
La vitamina D es muy importante para los dientes. Este componente es esencial para que tu cuerpo sea capaz de absorber calcio, el mineral que construye y conserva huesos y dientes. La vitamina D equilibra los niveles de calcio en la sangre y los hace utilizables para que el organismo pueda aprovecharlos. Si el balance de calcio disminuye demasiado, el cuerpo va a utilizar el calcio almacenado en tus huesos y dientes, lo que debilita tu estructura ósea al hacerla menos densa.
Vitamina K
La vitamina K se usa principalmente para la coagulación de la sangre. La vitamina K también afecta a la mineralización ósea. Esto a su vez daña los dientes, ya que están constituidos a base de la misma combinación de minerales que los huesos. Una deficiencia de vitamina K genera debilidad en los dientes. Este problema suele deberse a una enfermedad y no a una ingesta insuficiente por medio de la dieta. La vitamina K también afecta a la salud dental, ya que una deficiencia puede agravar el sangrado después de una limpieza dental de rutina.
El grupo o familia de vitaminas B incluye a la tiamina, la riboflavina, la niacina, la vitamina B-6 y B-12 y el ácido fólico. Estas vitaminas normalmente ayudan al cuerpo a metabolizar los alimentos para convertirlos en energía y a formar glóbulos rojos en la sangre. La deficiencia de vitamina B afecta comúnmente a la boca y a los dientes. Además de que las deficiencias de vitaminas del grupo B pueden debilitar los dientes, también pueden provocar ardor e hinchazón en la lengua y dificultad para tragar. Afortunadamente, vitaminas del grupo B se pueden encontrar en una variedad de alimentos, por lo que es fácil de consumir una cantidad adecuada a través de una dieta bien balanceada.
Fuentes
En realidad, tu cuerpo produce vitamina D cuando tu piel se expone a los rayos del sol. Para compensar la deficiencia de esta vitamina, puedes tomar un suplemento o pasar 10 minutos al día en el sol tibio de la mañana o la tarde. Tu cuerpo también produce vitamina K en los intestinos, pero puedes tomar dosis externas comiendo vegetales de hoja verde y brócoli. Las vitaminas del complejo B se encuentran en muchos alimentos, desde en las carnes y productos alimenticios de origen animal, hasta en las frutas y las verduras de color verde oscuro.
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